Franklin Romero: el poderoso disquero del grupo Aventura que recorrió un camino de polvo hasta ver la luz en la política
Franklin Romero, el empresario disquero que llevó a la cima al grupo musical Aventura y que recorrió un camino de polvo en su vida personal, encontró en la política su verdadera vocación, refrendada por sus triunfos como diputado y ahora, de manera consecutiva, en uno de los 32 asientos del Senado de la República, como representante de la provincia Duarte.
Romero, que ganó por el Partido Revolucionario Moderno (PRM), comenzó a tener nombre público a partir de la creacón del sello discográfico Premium Latin Music, que impulsó los inicios del grupo Aventura, a principios del siglo XXI.
Romero había llegado a Nueva York el 22 enero de 1982 junto a sus padres y hermanos, instalando en 1985 una tienda de ropa, cuya operación se extendió hasta el año 1987 y luego estableció un «barber shop», que manejó entre 1988 y 1990.
Entre los años 1990 y 2001 operó en asociación con su padre, un negocio de expendio de licores (liquor store), en El Bronx y regentó, en Inwood, la discoteca D’Kalaf, única en su clase en toda la zona, hasta el año 2004.
En el año 1996 Franklin fundó Premium Latin Music, empresa discográfica enfocada al manejo, producción y distribución discográfica.
A la par con su inclinación a apoyar proyectos musicales, en el 2000 las autoridades de Nueva York presentaron cargos en su contra por supuestamente haber participado en una red de distribución de cocaína que enviaba las ganancias a Colombia.
En ese entonces Romero huyó a República Dominicana, donde se estableció como empresario artístico como presidente del sello discográfico Premium Latin Music.
«Quien nos abre las puertas a nosotros en el mundo de la música, a nivel internacional, no es Aventura, es Elvis Martínez El Camarón, que fue nuestro primer artista de bachata», relató.
Luego de Elvis llegaron Aventura, Los Huracanes, Grupo Negro, Wason Brazobán, Ciudad de Angeles, así como Rita Indiana, Eddy Herrera y otros artistas.
Sin embargo, su primer artista como promotor artístico fue el merenguero Juan Félix, con quien empezó a conocer la música.
«Ahí es cuando conozco a Cholo Brenes, que fue una universidad para mí, conozco a Gloria Figueroa, que era una promotor muy importante en Nueva York, y así comenzamos a trabajar», relató.
En ese proceso duró varios años hasta 1998 cuando firmó a Elvis Martínez y a otros artistas, incluyendo a Nelson Javier (El Cocodrilo).
En el mundo del entretenimiento también incursionó en el cine, donde produjo varias películas, entre ellas una de las más taquilleras del cine dominicano: «Sanky Panky», dirigida por José Enrique Pintor.
SU DETENCIÓN EN NY
Los negocios del entretenimiento del productor iban viento en popa cuando en un viaje vía Panamá fue detenido en febrero del 2011 y llevado a Nueva York, donde fue enjuiciado por delitos pasados relacionados al narcotráfico y en abril de 2012 un juez federal lo dejó en libertad.
En ese entonces, Romero dijo antes de oír su sentencia que era un hombre distinto al que hacía doce años había huido a República Dominicana por miedo a ser procesado y pidió perdón a su familia y a la corte por los daños causados.
“Su Señoría, estoy aquí aceptando mi responsabilidad. Le agradezco la oportunidad porque me quitó un peso de encima que he cargado durante doce años”, le dijo al juez en una sala de la corte federal de Manhattan.
Luego agregó: “Soy consciente de que cometí un delito serio”.
El juez Lawrence McKenna dijo que el acusado ya había cumplido con su pena tras las rejas y en arresto domiciliario.
A su regreso a República Dominicana su vida tomó un giro cuando optó por hacer política en el 2015 y ya en 2016 fue electo como diputado.
En realidad su entrada fue a través del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) en 2015 y luego que se hace la alianza PRD-PLD prefirió pasar al PRM.
«Fue un gran reto venir del mundo del entretenimiento a la política, donde hay tantas personas que tiene años y años tratando de lograr una candidatura y una curul, y nosotros en nuestro primer intento el pueblo nos acepta, pues es una bendición», afirmó.
Luego añadió: «Mi familia no quería que yo entrara en política, mis amigos tampoco querían y ese no, esa negación de la gente, fue lo que me fortaleció».
Ese salto del entretenimiento a la política, sucedió en un momento en el que, según sus palabras, había un vacío en la provincia Duarte.
«Hemos estado en las cosas de más alto riesgo, como es la música, como es el cine, que son negocios donde tú inviertes y no sabes si va a ver un retorno, y entrar a la política, donde la mayoría siempre va a servirse y no a servir, nosotros entonces decidimos dar el salto del entretenimiento a la política», contó en una entrevista.
En su primer intento, con el respaldo del PRM, se alzó con la victoria y se convirtió en 2016 en uno de los diputados más votados.
En la Cámara Baja presentó 135 iniciativas, entre ellas proyectos de leyes y resoluciones, como La Ley de Mecenazgo, el Hospital Regional San Vicente de Paúl (proyecto en ejecución), Sistema de Emergencia 9-1-1, Plaza de la Cultura, Mercado Público, Equiparación Laboral para Personas con Discapacidad, Ley de Protección del Menor en horas nocturnas y entre otras de importancia para la nación.
Para las elecciones congresuales de 2020 «optamos por la senaduría y fuimos el segundo senador más votado».
Actualmente preside la Comisión Permanente de Cultura del Senado de la República. Además, forma parte de las comisiones de Contrato, Deportes, Interior y Policía, Obras Públicas y Relaciones Exteriores.
Entre los proyectos pendientes está el de impulsar una ley a favor de los bomberos y mantener su respaldo a las personas con discapacidad.
SUS ORÍGENES
Romero nació el 18 de octubre de 1963, en el barrio El Capacito, en San Francisco de Macorís, municipio cabecera de la provincia Duarte.
«El Capacito era el barrio más caliente que había cuando yo era niño, ahí viví hasta los 17 años, pero ahí me formé mirando todo lo que pasaba en los tiempos de Balaguer, siendo niño mirando a los más adultos enfrentar a la Policía, grupos rebeldes, quemar gomas, tirar piedras y tiros», contó al canal «Al Tanto TV».
De San Francisco su familia se mudó a Santo Domingo, pero regresó tiempo después, en 1981, para de ahí irse a Nueva York.
Después de un tiempo, «mi madre me consiguió un trabajo en una ebanistería, porque yo me formé como ebanista, ahí duré como cinco años y de ahí entré a otros negocios».
La música, el cine y la política «se fueron poniendo delante de mí», aseguró.
Sin embargo, la música «fue la primera empresa que todo lo que ganaba en los negocios se perdía en la música.
El senador es padre de cuatro hijos: Perla Maciel, Franklin Junior, Franshell y Farrell Martín.
Su pasatiempo favorito es jugar golf «y pasar un tiempecito con mi hijo que siempre me acompaña, porque los demás están en Estados Unidos, pero yo disfruto mucho estar con la gente».
Romero ganó adeptos políticos por su forma de actuar ante los problemas sociales de la comunidad y por su solidaridad.
Es frecuente acciones que van en apoyo a personas que padecen carencias, limitaciones de cualquier tipo, o son víctimas de alguna enfermedad.
Esto lo realiza a través de diversas obras de bien que promociona, patrocina y realiza.
Entre las obras sociales patrocinadas por Romero está la construcción de una escuela de dos niveles, en el sector Valle Verde, de San Francisco de Macorís, donde se educan más de 347 niños, desde el primer grado hasta el octavo.
Los costos de construcción, mantenimiento y gastos operacionales regulares de este centro educativo, bautizado con el nombre de Farrell Martín Romero, en memoria de su hijo fallecido a los cinco años de edad, corren por su cuenta.
Romero es de nuevo senador de la provincia Duarte, compuesta por 300 mil habitantes, con 7 municipios y 11 distritos municipales.
La provincia Duarte, la mayor productora del cacao y arroz, en la actualidad tiene en construcción 13 obras de vital importante, entre ellas apartamentos, oficinas gubernamentales, bellas artes, entre otras necesidades.